Características de los mamíferos marinos

 Los mamíferos acuáticos, como el resto de los animales mamíferos, se caracterizan por poseer glándulas mamarias que producen la leche para sus crías, así como glándulas sudoríparas. Así mismo, gestan a los fetos en el interior de su cuerpo. Sin embargo, estas no son las únicas características que presentan estas especies.

La vida de los mamíferos en el agua es muy diferente a la de los mamíferos terrestres. Para poder sobrevivir en este medio, han debido adquirir unas características especiales durante su evolución. El agua es un medio mucho más denso que el aire y, además, ofrece una mayor resistencia, por lo que los mamíferos acuáticos tienen un cuerpo extremadamente aerodinámico que les permite desenvolverse con facilidad. Desarrollar aletas similares a las de los peces ha sido un cambio morfológico significativo. Les permite aumentar la velocidad, dirigir la natación y comunicarse.

El agua es un medio que absorbe mucho más calor que el aire, por esto, los mamíferos marinos poseen una gruesa capa de grasa debajo de una piel dura y robusta que los mantienen aislados de estas pérdidas de calor. Así mismo, les sirve de protección cuando viven en zonas muy frías del planeta. Algunos mamíferos marinos tienen pelo porque ciertas funciones vitales las llevan a cabo fuera del agua, como por ejemplo la reproducción.

Aquellos mamíferos marinos que, en ciertos periodos de sus vidas, habitan en las grandes profundidades, han desarrollado otros órganos para poder vivir en la oscuridad, como el sónar. El sentido de la vista en estos ecosistemas no es útil, pues la luz solar no alcanza esa profundidad.